El pasado jueves a las 21hs en la sala Juan Carlos Dávalos de Casa de la Cultura se proyectó el documental “Cuando el Pueblo fue Hollywood” del director Federico Windhausen basado en la producción cinematográfica estadounidense Taras Bulba del año 1961 filmada en estos lados del mundo.Se podría decir que la convocatoria a ver este trabajo recordó también a la del filme original ya que las ansias de los asistentes se hacían notar en las inmediaciones de la sala. Muchos fueron con la expectativa de llegar a ver fragmentos de lo vivido en los sesenta, tal vez ilusionados de verse jóvenes nuevamente o de ver a la ciudad sin los cambios que hoy notamos. Qué pueblo no se entusiasma con la idea de participar en una megaproduccion hollywoodense.
El documental duró alrededor de cincuenta minutos. La versión a la que asistimos no contaba con la edición de sonido por lo que en alguna de las entrevistas resultó dificultoso escuchar con claridad. Entre los entrevistados se encontraba el actor Castulo Guerra (quien expresa que la participación en este filme le permitió definir su vocación), especialistas salteños que se encuentran trabajando en otros lugares del país y ciudadanos residentes de la ciudad que fueron convocados mediante anuncios en los periódicos y medios locales. Entre escena y escena se entrevió el marcó meramente anecdótico del trabajo. Las risas por los recuerdos de viveza criolla al momento de cobrar los días de rodaje, o las huelgas planteadas por los extras más algunos indicios históricos propios de la época fueron la guía para el espectador.
Al finalizar la proyección se inició el diálogo entre el director y el público. Mientras que algunos indagan en los pormenores de la realización otros opinaban del trabajo final. Algunas preguntas quedaron sin respuesta, como por ejemplo la veracidad de lo comentado por los entrevistados; el director comentó la imposibilidad de llegar a comprobarlo. Por otro lado, si bien la cantidad de entrevistados superaba la decena, el hecho de ser convocados voluntariamente no brindó la suficiente satisfacción testimonial a los presentes.
Lo realizado por Windhausen es sencillamente, y sin negar el aporte cultural y de archivo, una recopilación destinada a quien desee recordar 1961 como el año en que el pueblo salteño trabajo en Hollywood. Aun no contamos con la posibilidad de ver documentales de Salta o salteños constantemente pero el aporte es válido, al menos, a la historia.
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